Este jueves 18 de diciembre se enfrenta Nápoles contra Milán a las 16:00 horas por la Supercopa de Italia.
Nápoles llega golpeado tras el 1-0 ante Udinese, un partido donde tuvo la posesión pero fue incapaz de traducirla en peligro real. No registró tiros al arco pese al dominio territorial, una señal preocupante para un equipo que atraviesa un momento de sequía ofensiva. Sus últimos encuentros muestran una tendencia clara a marcadores bajos, con pocos goles y mucho control. La defensa mantiene el orden, pero el ataque está lejos de su mejor versión. Nápoles llega contenido, previsible y con presión por reaccionar.
Milán arriba después del 2-2 frente a Sassuolo, un partido irregular donde alternó buenos pasajes con desatenciones defensivas. Con nueve goles en sus últimos seis encuentros, el equipo de Allegri sostiene una producción ofensiva aceptable, aunque sin excesos. Suele manejar la pelota y generar ocasiones, pero le cuesta cerrar los partidos cuando toma ventaja. En duelos cerrados, su experiencia pesa. Milán llega equilibrado, competitivo y acostumbrado a este tipo de escenarios.
¿Pronóstico? Todo indica una final tensa, medida y con más cautela que espectáculo, fiel a la tendencia reciente de ambos. ¿Pronóstico? Entre uno y dos goles totales, con resolución ajustada y posible alargue.
